La idea de escuchar el himno nacional en Juegos Olímpicos ronda en la cabeza de Rommel Pacheco y así cumplir con la meta de obtener la máxima presea, situación que no ocurre para un clavadista desde 1956.

La dificultad para conseguir la medalla de oro en la competencia veraniega no será sencillo ante rivales de la talla del ruso Ilia Zakharov.

“La que yo quiero es la de medalla de oro. Juegos Olímpicos es una competencia muy difícil no solo por el nivel de los competidores sino por todo lo que envuelve, el circo que conlleva, hay que estar muy tranquilo y sereno.

“A la hora que estás compitiendo estás pensando ‘quiero oro, quiero oro’, pero tienes que estar pensando cada paso, cada ejecución, cada movimiento para que eso te lleve a la medalla”, explicó en entrevista con Mediotiempo.

Rommel, junto con el equipo de clavados masculino conformado por Rodrigo López, Iván García, Germán Sánchez y Jahir Ocampo, buscará emular a Joaquín Capilla quien logró el oro en los Juegos de Melbourne 1956.

Capilla fue el único representante nacional que obtuvo preseas en esa edición.

Rommel Pacheco ya experimentó la sensación de cantar el himno en Río durante la pasada Copa del Mundo y lo hizo a capela, para sorpresa de todos los asistentes.

Esto se debió a la suspensión de la Federación Mexicana de Natación por parte de la FINA por un litigio provocado por el incumplimiento de un contrato firmado en 2011 para celebrar el Mundial de 2017.

“Estoy ahí, estoy compitiendo por México. Fue algo que nació del corazón; estando ahí sentí esa emoción de poder cantar. Si volviera a pasar lo volvería a hacer. Es bonito ser mexicano, es un orgullo y es padre que se sienta así”, compartió el clavadista que vuelve a Río en busca del podio.

Tras su participación en Atenas 2004 cuando apenas tenía 18 años y en Beijing 2008, ahora tendrá una nueva oportunidad para traer a casa uno de los metales preciosos de los Olímpicos.

Rommel competirá de forma individual y junto a Jahir Ocampo en la prueba de trampolín de 3 metros en busca de la gloria anhelada.

(MEDIOTIEMPO)