- Este sábado se enfrentarán por tercera ocasión
La rivalidad entre el estadounidense Tim Bradley (33-1-1, 13 KO’s) y el filipino Manny Pacquiao (57-6-2, 38 KO’s) ha sobresalido más por la polémica de sus resultados que el espectáculo y técnica mostrados en el ring en sus dos primeros combates.
Fue el 9 de junio de 2012 cuando el MGM Grand recibió a ambos púgiles por primera, Pacman llegaba como amplio favorito en Las Vegas 5 a 1 sobre Desert Storm en la división de los welter, una paga considerable si se apostaba a favor de la «chica».
El también congresista filipino dio una cátedra de rapidez en el ring, Bradley vio cada ataque aterrizar en su rostro y cuerpo, además de un tobillo lastimado, la cara del retador mostraba grandes y notables protuberancias.
A pesar de que Manny asestó 259 golpes por 159 de su rival, los jueces dieron una puntuación de 115-113, 115-113 y 113-115 (decisión no unánime) a favor del estadounidense, entre abucheos, gritos de «robo» por especialistas y expúgiles, Timothy alzó los brazos en señal de victoria.
C.J. Ross fue una de los dos jueces que vieron ganar a Bradley, y tuvo otra dudosa decisión en septiembre del 2013, cuando vio un empate entre el mexicano Saúl Álvarez y Floyd Mayweather Jr.; a los pocos meses, renunció a su puesto en la Comisión de Boxeo de Nevada tras la presión de los medios y el público por sus últimas calificaciones.
Dos años después (12 de abril del 2014), los dos púgiles se volvieron a ver las caras; Pacquiao no tuvo piedad nuevamente y golpeó en 198 ocasiones, 57 más que su oponente en toda la ruta. Los jueces marcaron 112-116, 112-116 y 110-118 para darle el triunfo al asiático por decisión unánime.
Este sábado Manny buscará noquear a Bradley para no dejar en duda la superioridad de sus puños, su entrenador Freddie Roach preparó con mayor entusiasmo a su pupilo para dar fin a una trilogía que sobresalió por la polémica.
[MEDIOTIEMPO]