Por algo la tabla de goleo es acaparada por los foráneos. Por algo, la Selección Mexicana suele sufrir para encontrar delanteros.

La fase regular del Apertura 2016 reflejó contundentemente los contrastes entre los goleadores mexicanos de nacimiento contra los extranjeros y naturalizados para mover las redes.

La producción local fue tan pobre que de cada 3 goles marcados, menos de 1 fue anotado por los nacionales de origen durante las 17 fechas de fase regular.

De las 431 anotaciones en ese lapso, 120 fueron de mexicanos (27.84%), menos de la tercera parte, mientras que 226 las firmaron los extranjeros (52.44%) y 70 los naturalizados (16.24%), además de que hubo 15 autogoles.

Desde la fecha 1 la tendencia se fue marcando, ya que de los 35 goles esa vez, 19 fueron de extranjeros, 10 de mexicanos y 4 de naturalizados.

Para la Fecha 10 la diferencia se hizo abismal e irreversible porque de los 238 goles hasta ese momento, 124 los hicieron extranjeros, 38 naturalizados y 66 mexicanos; es decir, los foráneos superaban a los nacionales casi al doble.

En el total, de los 226 goles de foráneos, 105 fueron de jugadores argentinos, seguidos por 42 de colombianos, 22 de uruguayos y 18 de chilenos, además de 39 de otras nacionalidades.

En esta cifra figuran los 11 goles del peruano Raúl Ruidíaz y la misma cantidad del colombiano Dayro Moreno, la dupla extranjera que resultó campeona goleadora.

Así se confirmó una tendencia, ya que los últimos 16 campeones de goleo, algunos de ellos en solitario y otros en dupla, ninguno ha nacido en México. El último fue Ángel Reyna en el ya lejano Clausura 2011.

En el “top ten” de la tabla de goleo de este Apertura 2016 solo apareció un mexicano, Hirving Lozano, con 7 tantos.

Además, entre los primeros 25 lugares, los otros nacionales de nacimiento solo fueron Ángel Zaldivar, de Chivas, con 5 anotaciones en el lugar 20; Pablo Barrera, con 5 en el puesto 21, y Martín Barragán, con el mismo número de tantos y en la posición 23.

MEDIOTIEMPO