*Presentan queja ante la Defensoría de Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca.
Elizabeth Mendoza / Foto: Alfredo Juárez
Personal de confianza del Servicio de Administración Tributaria (SAT) sede Oaxaca, se manifestaron al exterior de la Defensoría de Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) en rechazo a los despidos masivos de esta dependencia, aunado a que presentaron una queja al considerar que existe una violación al derecho al trabajo, y las garantías, fundamentales.
Los inconformes, destacaron que el jueves 20 de diciembre, ocho trabajadores de confianza fueron obligados a firmar su renuncia, pese a que no se trata de aviadores y que son funcionarios que son evaluados al ingresar al SAT.
“Más de 50 trabajadores es tamos en apoyo de nuestros compañeros, porque sabemos que no se trata de aviadores, en el caso de los compañeros se les informó que se trataba de una decisión presupuestal, los están obligando a firmar la renuncia y con ello no cubrir la indemnización correspondiente”, afirmaron.
En ese sentido, explicaron que hay trabajadores con casi 29 años de servicio, a quienes no les están reconociendo el trabajo que han desarrollado en la institución, aunado a que están siendo amenazados para firmar su renuncia o de lo contrario serán boletinados para que no tengan otro empleo en el gobierno federal o estatal.
“Sabemos que es injusto lo que se esta haciendo, de un total de 409 empleados del SAT, al menos 200 corremos el riesgo de ser despedidos, pese a que los trabajadores somos evaluados, somos funcionarios fiscales de carrera, no se trata de cargos políticos”, reiteraron.
Asimismo, subrayaron de que el hecho que haya menos personal va a retrasar la atención en las solicitudes, “se trata de niveles bajos y representaría la pérdida de un activo importante de la institución, ya que se capacitaron, y entienden el funcionamiento”.
Finalmente, aseguraron que iniciarán las demandas de juicios laborales al concluir el periodo vacacional, toda vez que hay también seis módulos en el Estado que están en riesgo de cerrar, lo que implicaría que os contribuyentes se desplazaran a la sede central.