América quiere encontrar calma después de la tormenta en Concachampions y Veracruz.
Cruz Azul buscará demostrar que la regularidad puede ser una de sus características.
Con grandes ausencias pero aún con más grandes dudas para ambos equipos llega una edición más del Clásico Joven en el que América intentará eludir un resultado adverso que lo coloque ahora sí en una crisis, mientras que Cruz Azul quiere prolongar el paso que retomaron ante Xolos y que tranquilizó a su afición.
Y es que luego de los duros descalabros que las Águilas sufrieron en Costa Rica por la Concachampions y el revés ante Veracruz que puso en peligro la continuidad de Gustavo Matosas en el banquillo azulcrema, una derrota ante Cruz Azul podría ser un golpe definitivo en el semestre o por el contrario, un triunfo sería una inyección de ánimo fundamental para el cierre del torneo regular.
Para ello, América no sólo deberá superar los malos resultados en los que cayó sino también las lesiones que llegaron a tener hasta cinco de sus jugadores al mismo tiempo y que hoy solo tienen a Moisés Muñoz descartado y Pablo Aguilar en duda para estar el próximo sábado defendiendo en el Azteca.
Situación adversa de lesiones es la que vive Cruz Azul. Con Roque Santa Cruz descartado, de nueva cuenta, con el “Maza” Rodríguez saliendo de un problema personal y elementos como “Alemao” que no se encuentran al 100 por ciento, el equipo que presente Luis Fernando Tena será muy distinto al ideal que podría tener.
Es el propio estratega celeste, el que se coloca como una de las “armas” más importantes para vencer al mermado equipo de Gustavo Matosas pues el “Flaco” suma 12 encuentros sin conocer la derrota ante el odiado rival.
[MEDIOTIEMPO]