Uno de los elementos de los que parece colgar la etiqueta de “seguros” es el que quizá menos seguro tiene su futuro inmediato. Rafael Márquez, jugador del Hellas Verona de Italia, acumula casi dos meses sin jugar a poco más de un mes para que se conozca la primera lista de las dos que la Selección Mexicana tiene que conformar para el verano.
El Capitán del combinado nacional en la pasada Copa del Mundo vive un presente incierto con una lesión que parece haber superado, pero que aún no le ha permitido tener ritmo de juego para reaparecer en la Serie A y sembrar las dudas sobre su estado físico y futbolístico de cara a la Copa América y a la Copa Oro.
Después del Mundial que realizó, el ex jugador del León parecía ser uno de los “seguros” para estar en el listado del torneo que se jugará en Estados Unidos y que intentará conseguir el medio boleto para mantener viva la esperanza de estar en la Copa Confederaciones del 2017.
Sin embargo, ante las dudas que generaron los últimos partidos de la Selección que parece será la base para enfrentar la Copa América en Chile y ante la interrumpida actividad del central mexicano, la idea del estratega nacional podría modificarse en las próximas semanas.
Desde su llegada al Verona a finales de agosto, Márquez Álvarez ha jugado 21 partido, 20 de ellos como titular y con los 90 minutos disputados, aunque su última aparición fue el 1 de marzo cuando su equipo venció 1-2 al Cagliari.
Tras ese encuentro, el experimentado zaguero sufrió un esguince en la rodilla izquierda que lo ha privado de volver a las canchas tanto con su escuadra como con el combinado nacional.
Y es que las dudas también llegan al Tri, pues el defensor estuvo considerado por el “Piojo” Herrera para la única fecha que se disputó previo a los torneos ante Paraguay y Ecuador y en la cual el defensa no pudo estar debido a la lesión por lo que no ha podido ser visto con la playera del Tri desde la eliminación en la Copa del Mundo el 24 de junio del 2014 ante Holanda.
Son mil 845 minutos los que Rafa Márquez ha disputado en los últimos ocho meses y más allá de su probada calidad, los casi dos meses sin acción y los más de ocho sin vestir la casaca del Tri siembran dudas sobre el momento en el que el histórico jugador mexicano pueda llegar a la Selección Mexicana.
[MEDIOTIEMPO]