Durante la ceremonia conmemorativa por el Centenario de la Constitución, en el Teatro de la República, reconoció que México tiene una constitución que mantiene vigencia y eficacia desde hace cien años, porque se enriquece y se reconfigura, que es capaz de ser factor de unidad y de identidad nacional.

Ante secretarios de estado y gobernadores, subrayó que la unidad es la gran fortaleza de México, que permite construir y lograr acuerdos, sobre todo porque la constitución de 1917 refleja el dinamismo de la sociedad capaz de lograr acuerdos.

También puedes leer: Avancemos unidos llevando como guía la Constitución: Peña Nieto

Diputados demandan unidad nacional

El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Edmundo Javier Bolaños Aguilar, demandó unidad nacional ante las ofensas del vecino, porque si bien que México está muy lejos de saldar la deuda social que existe, hoy cuando las circunstancias demandan la unidad de los mexicanos, la constitución es un vínculo social determinante.

Durante la ceremonia conmemorativa por el centenario de la Constitución en el Teatro de la República, en la que el presidente Enrique Peña Nieto firmó el decreto de reforma constitucional en materia de justicia cotidiana, Bolaños Aguilar subrayó que la constitución no solo es la ley fundamental, sino reflejo de la realidad de una nación en un momento determinado y suma de los factores que rigen a un país, pero “se dejó de cumplir el compromiso que cien años se adquirió”.

Se pronunció por impulsar la unidad nacional para exigir respeto, de la misma forma que México respeta, al igual que unidad nacional entorno a las decisiones responsables del presidente de la república.

Agregó que la implementación de las reformas de los últimos años “ha quedado debajo de la expectativa de la sociedad y es hora de cerrar la brecha entre lo que dice la norma y la realidad”, para resolver los agravios de hoy, porque se exige educación de calidad, rendición de cuenta y transparencia de las autoridades, órganos de revisión autónomos de los poderes locales.

Resaltó que “si bien es inobjetable que México ha superado carencias ominosas, también lo es que estamos muy lejos de saldar la deuda social. La constitución es realidad y proyecto de futuro, pero no es la constitución mexicana, ni ninguna otra la que garantice y proyecta el progreso de las naciones”.

“No son las constituciones las que marcan las diferencias entre los p pueblos. No son las que nos hacen próspero o nos hunden en el atraso, son las instituciones que de ellas emanan”, agregó, ante los secretarios de estado y gobernadores del país.

EL SOL DE MÉXICO