El PRI, el partido en el poder en México, renueva su dirección con la sucesión presidencial de 2018 en el punto de mira. El veterano Manlio Fabio Beltrones, líder de partido en la Cámara de Diputados y uno de sus barones, encabeza una candidatura única para el asalto a la cúpula de la formación. El presidente Peña Nieto, en horas bajas de popularidad, volverá a contar como aliado con un histórico del priismo, que no pertenece a su facción política dentro del PRI y que fue su rival en la precampaña presidencial de 2012.
“Respetando los tiempos, esperaré a que se publique la convocatoria y si las reglas me lo permiten me registraré de inmediato como candidato a la presidencia del PRI”, señaló con cautela Beltrones en la mañana del jueves en una entrevista radiofónica después de que se filtrara a la prensa que será el hombre que dirigirá el barco del PRI de cara a las trascendentales elecciones presidenciales de dentro de tres años.
Esperaré a que se publique la convocatoria y si las reglas me lo permiten me registraré como candidato
“Está confirmado. Será el candidato único y siguiendo con la antigua tradición priista, es el presidente de la República, Peña Nieto, el que ha nombrado al presidente de su partido. Aún faltan los formalismos de la votación de los consejeros, pero la decisión está tomada”, sostiene la catedrática de Estudios Políticos del CIDE, María Amparo Casar. La confirmación está prevista para esta tarde tras la reunión de la Comisión de Procesos Internos del PRI.
Los estatutos del partido impiden que la cúpula se renueve en medio de un proceso electoral. Una vez terminados los 74 juicios promovidos después de los comicios municipales y estatales del 7 de junio, todo está ya listo para el cambio.
Con cuatro décadas de carrera política, Manlio Fabio Beltrones, de 62 años, ha ocupado prácticamente todos los asientos clave en el PRI. Comité Nacional, Subsecretario de Gobernación, coordinador de la Cámara de Diputados y del Senado, gobernador del Estado de Sonora. Bregado en los Gobiernos priistas de los ochenta, este licenciado en Economía, pasó un breve periodo por la empresa privada, al frente de una consultora que tiene como clientes a Estados, municipios y órganos públicos mexicanos. Su interés por la presidencia del partido no ha sido un secreto durante los últimos meses. “No creo que exista un militante en mi partido que no considere un privilegio ser considerado algún día para ser dirigente nacional”, dijo en mayo.
Beltrones no pertenece a la facción política del presidente, el grupo de Atlacomulco, y fue su contendiente en la candidatura del PRI en la precampaña presidencial de 2012. Una vez en el poder, Peña Nieto decidió sin embargo atraerlo hacia su círculo de influencia. Desde su puesto como coordinador del partido en la Cámara de Diputados jugó un papel crucial durante la negociación de la agenda de reformas con la que aterrizó el actual Gobierno. El presidente vuelve a echar mano de un peso pesado. En un momento en que la economía no termina de tomar altura y los últimos episodios, como la fuga de El Chapo Guzmán, han desgastado su popularidad hasta en las cotas más bajas desde que llegó a Los Pinos.
“El presidente ha roto su patrón de conducta respecto a los nombramientos. Esta vez no se ha optado por criterios de amistad y lealtad. Beltrones no ha sido nunca de su entorno íntimo y se especuló que podía ser alguien más cercano como Aurelio Nuño [actual jefe de Gabinete]. Pero ha privilegiado el mantenimiento de la unidad al interior del PRI. Beltrones siempre ha sido un hombre institucional y con gran eficacia en las negociaciones. Me parece un acierto. Da más benéficos que desventajas tanto al presidente como a su partido”, apunta la catedrática Casar.
La nueva ejecutiva del PRI será ratificada oficialmente el próximo 20 de agosto. Algunos consejeros, sin embargo, no han esperado a que se cumplan los formalismos. El gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, del Partido Verde, aliado del PRI, escribió en Twitter en la maña a de ayer: “Felicito y le deseo el mejor de los éxitos al licenciado Manlio Fabio Beltrones en esta nueva etapa como dirigente del PRI”.
ELPAÍS